Tachenko en Ebrovisión, estos nos son jóvenes, o sí, lo que son, son poseedores de la melodía y de la canción preciosista, son los mejores en lo suyo y lo suyo, a los que hacemos todo esto, nos encanta.

Decir que Tachenko, después de más de diez años de carrera y cinco álbumes editados –más álgunos EP- se encuentran en su mejor momento, y que su sexto álbum, “El comportamiento privado” (Limbo Starr, 2015) es el más brillante atendiendo a la calidad de sus canciones y su producción, es mucho decir, y más teniendo en cuenta su *discografía.

Su filosofía se resume en la frase “Siempre en busca de la canción perfecta”, aspiración máxima para un grupo de pop atendiendo al tópico “lo importante es la canción”, detalle que los mide con los grandes del género y que ha convertido a Sergio Vinadé y Sebas Puente en una pareja compositiva sin parangón en la actualidad, gracias a títulos como “Amable”, “El golf”, “Hacia el huracán”, “Escapatoria” o “Dame una pista” -por citar solo una por álbum-.

Obras imperecederas capaces de crear un sentido propio en el oyente y transportarle a momentos reales o imaginarios. El compromiso es el cimiento de la banda, y si no lo hubieran abrazado con fe ciega habría sido imposible sobreponerse a las dificultades que supone entregarse a tal fin. Su actitud es su bandera, y su positivismo uno de sus principios, aun estando claramente posicionados y conscientes del aquí y ahora.

Su constante actividad en el circuito de salas y carteles de festivales los ha convertido en todo un referente y su música, parafraseando al filósofo del fútbol, es un “estado de ánimo” que hace del mundo un lugar más confortable y la vida más llevadera.

Tachenko en Ebrovisión, estos nos son jóvenes, o sí, lo que son, son poseedores de la melodía y de la canción preciosista, son los mejores en lo suyo y lo suyo, a los que hacemos todo esto, nos encanta.#unfestivalqueenamora